Todos la habían probado, todos sabían qué era, pero muy pocos la habían preparado y ninguno sabía que: el agua se calienta y se trasforma en vapor, el polvo blanco de la gelatina tiñe el agua de colores, que la gelatina es líquida y hay que transportarla con mucho cuidado hasta el refrigerador, que cuando abrimos el refigerador está sólida y que si destapamos el molde, la gelatina sale de ahí sin romperse, ¡lista para saborearse en compañía de los amigos!
Todo esto para explicar el significado de la palabra wobble… ¡Buen pretexto!