Compartir, ayudar, convivir

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María Montessori desarrolló el Método a partir de una necesidad interna que surgió el día que visitó el hospital psiquiátrico de Roma. Fue un momento en el que ella observó y actuó en consecuencia para rescatar de ese mundo al grupo de niños que se perdían entre las sombras de tan lúgubre espacio. Su Método se basó en la observación de detalles. Pasó años de su vida compartir ayudar convivir 5observando y haciendo comparaciones de las actitudes de muchísimos niños de varios países.  Culturas diferentes y, sin embargo, mismas necesidades y respuestas en cada uno de los niños de cada uno de esos grupos…  La pedagogía Montessori tiene sus bases científicas en la observación.

Partiendo de ese punto -la observación, las Guías Montessori desarrollan sus presentaciones; es por ello que a cada niño se le dará una presentación diferente. Quien ha entrado a un Ambiente Montessori se maravilla de encontrar a todos los niños trabajando con algo diferente en constante movimiento productivo. Cada uno va a su paso, siguiendo su impulso interior.

A partir de la observación, la Guía encuentra diferentes formas de trabajar con cada uno de los niños. Propone  oportunidades para desarrollar su conocimiento y sus habilidades decompartir ayudar convivir 8 maneras que, probablemente en otras comunidades educativas, no pudiera darse, o no con tanta frecuencia como en los Colegios Montessori.

Queremos compartir con ustedes el momento en el que dos grupos de edades diferentes trabajaron en un proyecto del que ambos se beneficiaron, pero lo más lndo de todo: todos se sintieron felices después de la experiencia.

Precisamente, de la observación surgió esta idea de hacer que los niños “sintieran” la lección que estaban estudiando. Que ellos también “observaran” más allá de lo que estaban leyendo en sus libros. Que tuvieran la oportunidad de comprender desde otro punto de vista lo que significaba el fondo de la lectura que estaban estudiando.

Un grupo de niños estudiaban una selección del libro de ingés llamada “¿De qué manera ayudar a otros nos beneficia?”  y entonces se les dio un reto: Dar una lección en inglés a los pequeños de Casa de los Niños.  Ayudarlos a comprender una lección que resultaba difícil para los más pequeños, por lo tanto debía ser dada con gran cuidado y atención para que ellos pudieran aprender; así que,  a cada uno se le asignó uno o dos “alumnos”. El trabajo se hizo en un espacio abierto, ellos decidieron cómo hacer su presentación y qué trabajo desarrollar para que los pequeños entendieran; había sólo una regla: no podían hablar español.

compartir ayudar convivir 4El reto fue superado de manera exitosa y, no sólo los más pequeños aprendieron la lección presentada, sino que los más grandes pudieron trabajar habilidades sociales como la paciencia, ya que tuvieron que buscar diferentes formas para expresar lo que los pequeños no entendían. 

 

Aquí las imágenes de tan lindo momento, nos hace recordar lo que escribió María Montessori a propósito de la sociedad que se crea en sus colegios:

 

 “La convivencia social conduce a los niños a sentir y actuar en grupo… Crea lazos formados por un sentimiento en común y, sin embargo, individual: a pesar de ser “individuos independientes” se hallan movidos por un mismo impulso”