“Es un hecho que el niño que ha utilizado las manos desarrolla un carácter más fuerte.
Si las circunstancias le impiden usar las manos, tendrá poco carácter, carecerá de iniciativa, no sabrá obedecer,
y pasará todo el tiempo triste y sin ganas de hacer nada.
En cambio, el chico que tiene la posibilidad de trabajar con las manos mostrará un carácter firme.”
María Montessori en Educar para un Nuevo Mundo.